Las cifras publicadas por el Ministerio de Seguridad Pública de China muestran que desde enero se han presentado 943 casos de comercio ilegal de vida silvestre, con más de 5,3 toneladas de productos de vida silvestre incautados.
La policía de China ha incautado más de 5,3 toneladas de productos de la vida silvestre desde que el mortal coronavirus llegó al país.
Los expertos han advertido que los cadáveres de animales exóticos pueden portar patógenos mortales como el que causó el brote de COVID-19.
Más de 3.000 personas han muerto de la enfermedad en todo el mundo, con 89.000 casos confirmados, 40 de los cuales están en el Reino Unido.
Al menos 943 casos de comercio ilegal de vida silvestre se han presentado desde enero, las autoridades chinas han revelado.
De esos casos, al menos 2.147 investigaciones se han llevado a cabo, con 92.000 cadáveres de animales destruidos.
Los informes recientes muestran una demanda preocupante de los productos, a pesar de los vínculos entre el coronavirus y el consumo de carne exótica.
El gobierno intensificó sus esfuerzos para reprimir el comercio exótico tras los llamamientos internacionales para la prohibición total de todos los productos de animales exóticos.
En China, ahora está prohibido cazar, comprar, transportar o vender productos animales relacionados, especialmente los que están protegidos por el Estado.
Sin embargo, eso no ha detenido a algunos vendedores que siguen haciéndolo en el mercado negro y desde casa.
El origen del coronavirus aún no ha sido confirmado, pero se ha informado ampliamente que la enfermedad se originó en un mercado de mariscos en Wuhan.
Wuhan es la capital de la provincia de Hubei en China Central y los primeros casos del coronavirus se confirmaron allí en diciembre pasado.
Fuente: Alerta Geo.
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